martes, 29 de abril de 2008

Sigue caminando...


Caminó sola por la noche por aquella calle solitaria. Vestido negro, zapatos de tacón y un abrigo. Al caminar escuchó el eco de sus pasos acompasados. De pronto una mano rozó su espalda y a su oído alguien susurró "sigue caminando..." Obedeció. Sus pasos se dirigieron entonces a los soportales; el desconocido de la voz misteriosa olía a tabaco dulce y tenía unas manos bonitas...


Antes de darse cuenta, salió de los soportales y el desconocido volvió a susurrarle "sigue caminando..." Metió las manos en los bolsillos y descubrió una nota; SIGUE CAMINANDO... y un número de teléfono...


-Hola-

-Qué bueno que llamaste...-

-Yo...-

-Yo también-

-Pero...-

-Sí-

-Entonces...-

-Sí-

-¿Qué...?-

-Un imposible-

-¿Quieres...?-

-Sí, descolocar tu vida-

-¿ Y si...?-

-Dame una noche, o víveme unos días-

-¿... me enamoro?-

-Deja que te haga feliz-

-¿Más?-

-Todos tus días, todas mis noches-

-Todas-

-No, todas no; sólo una para convencerte, el resto para disfrutarte-

-No soy la princesa de la boca de fresa-

-Y yo sólo tengo cuatro paredes en blanco y un sofá barato-

-¿Y si a las 12 me convierto otra vez en Cenicienta?-

-¿Y si te cabe el zapato?-

-Tendrás que enseñarme...-

-Todo; dónde hacer la compra, los cines, las peluquerías, la maternidad...-

-¡Maternidad!-

-Eternidad-

-Mi maleta..-

-Te pongo mis síes en bandeja-

-Las manos...-

-Clavadas en el corazón, ¿no notas la presión?-

-24 horas-