domingo, 8 de enero de 2006

Carta a los Reyes Magos (II)

Después de la resaca de las fiestas, del champán de nochevieja y la sidra de la noche de reyes; después del atracón de turrón, polvorones y mazapán; después de salir dos o tres noches por semana y llegar a casa de día con los churros para el desayuno y el pan para comer; después de los regalos y las compras aceleradas a última hora... llegó por fín la cuesta de enero.

Aún no he visitado la báscula, pero me parece que dejaré que pasen un par de semanas antes de hacerle una visita y que me sorprenda con un número mágico (que no es el 69). Por fín se acabaron las Navidades, y menos mal, porque esto no hay quien lo aguante. Ahora llega el momento de tomarse en serio los propósitos que hicimos hace casi un mes (sí, esos de dejar de fumar, ponerse a régimen, ir al gimnasio, ser buenos, etc.).

Estos días he tenido tiempo de pensar un poco y he decidido que ya sé que quiero para mi cumpleaños, y aviso con tiempo para que vayáis ahorrando: UN PORSCHE! Sí, un Porsche, pero de los de verdad. Es que desde que probé el de Rafa (Rafa, me has hecho mujer...) ya no quiero otro, me gusta, y quiero uno. Vamos, que uno se siente importante dentro de un coche como ese, parece que tienes perras, y por la autovía te miran los demás conductores con cara de "Jooder! Vaya buga! Y yo con esta chatarra... Que hijodep*** el tío, mira que coche lleva". Y aunque vayas de copiloto te da lo mismo, te sientes importante también. Las demás te miran con cara de "Claro, guapa, teniendo ese coche mi novio yo también sonreiría" y es cuando aprovechas para enseñar todos los dientes, como la Pantoja, y decir "Qué, te gusta, eh? Yo lo ví antes, una lástima, sigue probando que igual a la próxima tienes suerte".

En fín, que quiero un Porsche. Así que queridos reyes magos de oriente, si leeis esto, ya sabéis qué tenéis que traerme el próximo año (porque me da a mi en la nariz, no se por qué, que no me lo vais a regalar para mi cumple), dejáos de pijamas de ovejitas y perfumes y estiráos un poco, que me portaré bien.

No hay comentarios: